Modelos de mediación en los casos de sustracción transfronteriza de menores
La mediación suele tener lugar en el mismo país que el proceso judicial y se programa varios días antes de la audiencia. Como los casos de sustracción transfronteriza de menores siempre resultan muy conflictivos y tienen lugar bajo presión y en un marco judicial y temporal muy ajustado, habitualmente se admite que la comediación resulta esencial. La Guía de Buenas Prácticas en Mediación establece, en su apartado 6.2.3(inglés):
Con arreglo a la experiencia obtenida en asuntos familiares transfronterizos en proyectos de mediación germano-franceses y germano-estadounidenses, la Declaración de Wroclaw sobre mediación en litigios binacionales en materia de responsabilidad parental(inglés) de 2007 recomienda el siguiente modelo de comediación:
- binacional: un mediador del país de origen de cada progenitor.
- bilingüe: ambos mediadores deben hablar los dos idiomas.
- igualdad de género: un hombre y una mujer.
- biprofesional: un mediador con formación psicosocial o educativa y el otro con formación profesional jurídica.
Este modelo resulta beneficioso para las partes, ya que ambos antecedentes culturales quedan reflejados en el proceso de mediación y se entenderán sus idiomas, actitudes, valores y prioridades. También resulta beneficioso para los mediadores, ya que pueden estar seguros de comprender la situación emocional y jurídica, muy compleja e intensa, y pueden abordarla de la forma más constructiva posible brindándose apoyo mutuo, al mismo tiempo que dan forma a una cooperación transfronteriza. Su imparcialidad no se ve afectada.